BIENVENIDOS

Este blog es el resultado del trabajo realizado por los estudiantes de la asignatura "Comunicación, Conflicto y Periodismo" de la Facultad de Comunicacion Social para la Paz de la Universidad Santo Tomas de Bogota, Colombia. Esta investigación ha sido desarrollada por: Diego Fernando Monroy, Angela Viviana Silva, Gina Carolina Sierra, Jeisson Martinez, Luis Fernado Giraldo y Lorena Arenas. El trabajo ha sido dirigido por el profesor Maurizio Ali”.

domingo, 26 de abril de 2009

DUERMEN PERO NO DESCANSAN

En el Cementerio Central los cadáveres que no son reclamados por sus familiares luego de terminar el tiempo de arrendamiento del cuerpo, son vendidos a universidades y estudiantes de medicina.

Los cementerios privados, son lo que más venden huesos y dientes a estudiantes de medicina, con un permiso especial de la universidad acreditándolo para hacerlo, pese a no tener una veeduría por parte del distrito, así lo cito doña Concepción.

“He trabajado aquí en el Cementerio Central durante 43 años de mi vida y siempre he sabido del negocio de la venta de los huesos y dientes. Muchas veces vi a los sepultureros sacar de tumbas esqueletos para comerciarlos aquí mismo. Es más algunos dicen que en la recepción tienen un formato que diligencian los estudiantes donde hacen la solicitud y además de eso agregan un permiso de la universidad donde acreditan que son estudiantes de medicina” cuenta doña Concepción Ramírez, vendedora de flores.

Fabricantes de lápidas, vendedores de flores y celadores del sector son testigos de los diferentes usos y abusos que se le hacen a un cadáver, como tumbas saqueadas, ritos y brujería es lo que más se ve en el Cementerio Central; aunque esta situación solo la conocen aquellos que han trabajado durante años en este lugar, afirman los sepultureros.

“Todos los días tengo que barrer y hacer aseo en el Cementerio Central, desenterrar muertos a los que se les ha acabado el tiempo de arrendamiento y encuentra uno muchas cosas: plumas negras, muñecos en cera dentro de las tumbas, velones, alfileres, animales secos, cintas pegadas en la parte de los pies entre otras, y eso es gente que entra hacer maleficios; Anteriormente habían negocios de magia negra alrededor del cementerio pero con el tiempo, construyeron locales nuevos y ya no están” dice Fernando Ponguta trabajador del lugar.

Sin embargo Diego, Gina, Jeisson y Lorena estudiantes de la universidad Santo Tomás, visitaron el Cementerio Central y comprobaron la existencia del formulario que se podía solicitar y diligenciar en la oficina de administración; luego de hacerse pasar por estudiantes de medicina a quien supuestamente son los únicos que les pueden vender huesos. Aunque la recepcionista de esta oficina dijo que esto se daba a que el distrito estaba en permanente veeduría cosa que no ocurría en los cementerios privados.

Pues ya ni los muertos gozan de la luz perpetua y de un campo santo porque han profanado muchas veces su casa con fines maléficos y económicos que aun los vivos aprovechan.


Claudia Lorena Arenas

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

home page statistics