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Este blog es el resultado del trabajo realizado por los estudiantes de la asignatura "Comunicación, Conflicto y Periodismo" de la Facultad de Comunicacion Social para la Paz de la Universidad Santo Tomas de Bogota, Colombia. Esta investigación ha sido desarrollada por: Diego Fernando Monroy, Angela Viviana Silva, Gina Carolina Sierra, Jeisson Martinez, Luis Fernado Giraldo y Lorena Arenas. El trabajo ha sido dirigido por el profesor Maurizio Ali”.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Los muertos como herramientas para ayudar a los estudiantes

Camilo Andrés Vargas un estudiante de medicina de cuarto semestre de la Universidad el Bosque de Bogotá. Quien nos conto como es el trato que le dan a los cuerpos que son utilizados en estas instituciones como una herramienta educativa.

¿De dónde salen los cuerpos que se utilizan allí?
Bueno la verdad eso sucede igual que con la donación de órganos. En el momento que muere una persona, la familia puede firmar un poder en donde se le otorgue la posibilidad de usar el cuerpo como un objeto para la ciencia; es hay en donde las universidades tiene una lista con este tipo de personas que son recibidas en medicina legal para este fin.

¿Los N.N puede ser utilizados?
Estas personas que no tiene identidad no puede ser utilizadas con este fin ya que, las entidades institucionales como Fiscalía o la que lleve la investigación; da un tiempo de seis mes para que aparezcan los familiares de la víctima. Y después de 6 meses el cuerpo uno está congelado y no se pude manipular bien y dos si no es así ya está en proceso descomposición.

¿Cuál es el trato que se le da a un cuerpo?
Bueno primero que todo, estos cuerpos son metidos en piscinas de formol, en donde permanecen allí por 4 o 5 meses esto con el fin de que se preserven y no tenga mal olor. Además de esto estos cuerpos pueden ser utilizados por mucho tiempo, ya que después de ser utilizados regresan a la piscina de formol.

¿Estos cuerpos conservan los órganos?
Si estos cuerpos son tal cual como si acabaran de morir, además de estos órganos nos periten simular todo tipo de maniobras, y hacer de cuenta que se esta trabajando con un vivo. Bueno el caso estos cuerpos soportan a diario que los abran y los cierren por más de 8 horas, claro está que eso depende el cuerpo que uno necesite al momento de realizar la práctica.

En conclusión estos cadáveres son donados con fines científicos, esto quizás lo hacen para ayudar a los futuros médicos, algo muy parecido a lo que sucede con los órganos.

500 personas esperan por un trasplante de órganos señala el instituto nacional de salud

A pesar que Colombia lidera en Sur América con los índices de donantes de órganos, 20 personas por millón, no está a la par con países europeos como España en el cual son 35 personas por millón.


Es por esto que en los últimos años se han implementado proyectos y campañas tales como la hecha por al ex Alcalde Lucho Garzón en donde se estableció que el 25 de abril es el día nacional de la donación de órganos. Entidades como el Instituto Nacional de Salud, el Ministerio de Proyección Social entre otras, y medicina legal han dedicado tiempo a promover la donación de órganos entre los colombianos.


El instituto Nacional de Salud, (INS) es una de estas entidades encargadas de los procesos de donación de órganos en Colombia, está adscrita al Ministerio de Protección Social, “siempre buscando proteger y mejorar las condiciones de la salud de las personas prestando servicios mediante la salud pública” dice el doctor Edwin Cárdenas, funcionario del ministerio de protección social.


Esto no quiere decir que el instituto este dedicado exclusivamente a la donación de órganos, sino que entre sus departamentos se encuentra la Red de Donación y Trasplante de Órganos y Tejidos que fue creada en el año 2004 y “la red es el conjunto de entidades relacionadas con los procesos de donación y trasplante en el país, el INS por medio de la resolución 214 de marzo de 2005 y de acuerdo con el decreto 2493 de agosto de 2004, resuelve crear el grupo de donación y trasplante el cual tiene a su cargo la Coordinación Nacional de la Red de Donación y Trasplantes”( Instituto Nacional de Salud).


Entre las funciones del INS se encuentran:” la coordinación, mejoramiento de los procesos de obtención, donación, preservación, almacenamiento, trasporte, destino y disposición final de los mismos; así como regular los procesos de trasplante e implante de componentes anatómicos, mediante diferentes acciones que realiza la Red a lo largo y ancho del territorio nacional, con las cuales desde su conformación en el 2005 más de 2900 personas se han beneficiado de un trasplante de órganos”(INS).


En Colombia, actualmente son más de 500 personas entre niños, jóvenes y adultos los que esperan por una oportunidad de vida, por un trasplante que en muchos casos no llega. Lo casos más contados son los de trasplantes de riñón, corazón, hígado y pulmón, en el 2004 se realizaron 92 trasplantes de riñón, y en este momento hay cerca de 400 personas en lista de espera de un donante de este órgano. En el 2005 se realizaron también 110 trasplantes de hígado, y hoy están en espera 62 personas. Para trasplante de corazón están esperando un donante 15 colombianos. El año anterior se realizaron 37 trasplantes aseguro Cárdenas.

¡COLOMBIA! UN PAÍS SIN CULTURA DE DONACIÓN DE ÓRGANOS

¿Sabía usted que un donante puede salvar la vida de 55 pacientes? Según la Corporación Da Vida, actualmente por cada un millón de colombianos hay 12 donantes en todo el país.

En Colombia hay más de 3000 personas con la esperanza de poder vivir; la mitad de ellos han muerto por la falta de órganos. En el 2002 el número de donantes no solo ascendió en Colombia a 10.7 por un millón de ciudadanos, en países como España está por encima de 33 y estados unidos con 22.

Para el doctor Álvaro Velázquez jefe del programa de trasplanté de órganos Fundación Valle de Lili, Cali, es una de las ciudades donde se presenta problemas de desconocimiento y tradiciones socioculturales que tienen que ver con aspectos religiosos, razón por la cual la Corporación Da Vida realiza campañas publicitarias para concientizar a la población.

De acuerdo al informe del 25 abril del 2008 día de la donación de órganos y tejidos en Bogotá: En los últimos nueve años, 3.398 personas han salvado su vida a través de un trasplante de órganos o tejidos (piel, huesos, córnea), sin embargo hoy 415 personas en la ciudad están en lista de espera porque requieren recibir trasplanté de un órgano para mejorar su calidad de vida.

Según la ley colombiana ha permitido la donación de órganos y tejidos con fines de trasplantes y prohíbe todo tipo de remuneración por los órganos; sin embargo el médico Fernando Girón Secretario Asociación Colombiana Trasplantes de Órganos, asegura que los trasplantes no solo mejoran el aspecto emocional, físico y social si no que también l le da la oportunidad al paciente de tener una calidad de vida convirtiéndose en la mejor alternativa de la medicina .

De otro lado confirma que es imposible que el tráfico de órganos se lleve en la actualidad, debido a las exigencias quirúrgicas y cuidados que requieren un órgano al ser sacado del cuerpo humano; aunque es frecuente escuchar denuncias sobre este hecho; para poder hacerlo necesitarían una clínica con cientos de profesionales y con una infraestructura de miles de millones y equipos que fácilmente se pueden detectar.

En la actualidad los órganos que tienen mayor demanda son, riñones, corneas, medulas óseas y corazón. Hoy millones de personas están a la espera de una donación para poder vivir.

Toda persona viva o con muerte encefálica, puede ser donante sin importar, la edad, sexo o religión.

VIVIR DE LA MUERTE

Es un día normal, en donde el frió del amanecer y el sonido de los pájaros nos anuncian una jornada mas en el arte de vivir, muchas son las cosas que nos sucederán en el transcurso del tiempo hasta que el sol se esconda de nuevo; trabajar, estudiar, comer, caminar entre muchas otras acciones, son el componente de un día como cualquier otro. Sin embargo, de repente, algo cambia esta rutina.

Tras el paso de un día demoledor de trabajo o estudio, nos dirigimos a tomar el transporte camino hacia nuestro hogar; como ha sido una jornada tan exigente nuestros sentidos no funcionan al cien por ciento, vamos cruzando la calle y de repente se atraviesa una persona que había tenido un día parecido al nuestro, gozaba de la posesión de un automóvil, choca abruptamente con nuestro cuerpo, de tal manera que lo levanta por los aires, y cae inconsciente, al pavimento.

Después de un arduo trabajo de los médicos, el corazón dejo de latir, nuestro cerebro se desconecto de la realidad y se vio inmerso en un mundo que a ciencia cierta nadie sabe su composición.

El cuerpo sin vida fue llevado a una funeraria, ubicada en un punto de la ciudad, este lugar que por lo general es sobrio y frió, con un impregnante olor a flores, que se combina, con el aroma de las yerbas aromáticas y del café, es insoportable para quienes aun se mantienen con vida y despiden a la persona que habitaba lo que ahora es visto como un cuerpo inerte.

Carlos Ortega Jiménez, Técnico Tanatologo, es el encargado, de acondicionar el cuerpo para, que no vaya a transmitir malos olores o enfermedades a sus familiares y personas que lo van a observar por ultima vez.

El acondicionamiento consiste, en introducir un tubo quirúrgico, por el cuello mediante el cual se van a extraer todos los fluidos del cuerpo para reemplazarlos por preservantes como el Formol; cabe resaltar que antes de este procedimiento “se ha lavado el cuerpo con jabón de loza, preferiblemente jabón Axion, ya que deja el cuerpo bastante limpio, y desaparece por completo la sangre seca que queda en algunas partes del mismo”, señala Carlos.

“Las familias siempre viven muy pendientes de los órganos de su ser querido, la gente piensa que nosotros se lo vamos a sacar, lo que no saben es que tenemos terminantemente prohibido hacer esto, ya que si alguien se da cuenta se puede acabar nuestra carrera (…) en el caso de los marcapasos que son muy costosos, muchas veces los familiares nos piden que lo saquemos y se lo entreguemos, para hacer esto la familia tiene que pasar una carta por escrito a la funeraria, para poder abrir el cadáver y sacar el dispositivo” afirma Carlos Ortega.

Con solo $800.000 Carlos mantiene a su esposa y sus tres hijos, aunque por cada cadáver arreglado, se gana una comisión “hay días en los que solo llega un cadáver, pero muchas veces alcanzo a arreglar hasta 10 cadáveres” de estos diez cadáveres que embellece Carlos, solo uno, aproximadamente decide, donar sus órganos, “la donación de órganos esta muy satanizada ya que la gente piensa, es que se va a vender los órganos de sus familiares en el mercado negro, pero no se dan cuenta que hay personas que necesitan de estas partes para poder vivir”

Este personaje seguirá en su rutina diaria, esperando que llegue la hora de partir de este mundo “anhelo 2 cosas, la primera, que mis hijos sigan realizando mi trabajo, y la segunda que mis órganos sean un grano de arena para salvar la vida de algunas personas”

LA CIUDAD NUNCA DUERME


Como todas las noches Juan Gutiérrez sale de su casa para encontrarse con su compañero de trabajo Ronald Hernández; “quizás esta noche sea diferente a todas las demás” asegura Don Juan un hombre de 46 años quien cada noche recorre las calles de Bogotá junto a Ronald un joven de 27 años, estudiante y practicante de criminalística. Como todas las tardes a eso de las 6:30, se dirigen hacia la calle 7ª Nº 12 – 61; mas exactamente al Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Allí recogerán su vehículo de trabajo o más bien la móvil de levantamientos.

“los viernes son muchos los casos que se presentan en la ciudad y el trabajo es más complicado” cuenta Don Juan quien con sus años de experiencia instruye Ronald para que sea el mejor en su trabajo. Quizás son muchas las anécdotas y las historias con las que uno se encuentra en este trabajo, además es muy duro ver como las familias se desintegran por causa de la violencia. Es muy común recoger cadáveres apuñaleados, con heridas de bala, gente que se suicida, cuerpos descuartizados… ese el pan de cada día y lo que nos toca ver a nosotros, es quizás el trabajo más duro que hay en todas las profesiones, y pues por ganarme 850.000 pesos nos toca guardar todos los sentimientos y dejarlos en la casa.

Por otra parte cada vez que me encuentro con uno de los cientos casos que me toca atender, ruego a Dios que al momento de llegar a la escena del crimen no me encuentre con ningún familiar o con alguna persona que conozca. Ese día no seré capaz de cumplir con mi trabajo. Esas son las palabras de un hombre que ha diario se codea con la muerte, una persona que cada noche recoge y lleva los cuerpos a Medicina Legal.

Bueno quizás recuerden uno de los casos que más les ha impactado. “pues la verdad nunca voy a olvidar a que caso que sucedió en Chapinero, eso más o menos un año… estábamos a punto de terminar nuestro turno y solicitaron la ayuda de una móvil en chapinero, esa noche el trabajo había estado flojo, pues no teníamos sino 2 cuerpos en las bandejas. Al momento de llegar a la escena del crimen nos encontramos con el famoso caso del cuerpo descuartizado, en donde lo primero que encontró fue la cabeza de una mujer, y usted sabe uno tiene que andar detrás de los investigadores del CTI y La Fiscalía, pues tardamos mucho tiempo en encontrar todo el cuerpo y realizar el levantamiento. Ese si es un problema en medicina legal ya que el médico forense que asuma el caso tiene que comenzar a armar el cuerpo como un rompecabezas

Llegados a Medicina Legal aproximadamente a las 8:30 de la mañana, nos encontramos con otros dos personajes que hacen parte de esta historia, Marco Tulio Rodríguez y Mario Alberto Lozano, ellos son los especialistas, que día a día reciben los cadáveres, o los restos; averiguan cuales fueron las causas de la muerte, “me parece un trabajo como cualquiera, es lo que me gusta hacer, el miedo se pierde después de 10 pacientes” señala Mario Alberto.

Estos dos especialistas, en criminalística, analizan y reciben cerca de 10 cuerpos en su turno, “eso depende mucho, porque cuando es quincena, se reciben más cuerpos” afirma Mario Alberto
Por $1200.000 mensuales, estos personajes entran y hacen parte del negocio de la muerte, sus familias viven de la tragedia de otros, los precios o pagos varían, depende, del especialista, y a que se le mida, ¿el miedo?, No existe en sus diccionarios, “la muerte es algo normal, a todos nos toca, no sabemos cuando puede llegar” Juan Gutiérrez
 

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